VEINTITRÉS. Llueves. Te derramas en mi boca. Ya no quedan caminos, sólo el fulgor de tus manos. Se estremece el tiempo. Fecundas encuentros en el vuelo húmedo de la sirena. Me toca tu voz esperada. Humedad láctea en los ojos amarillos de la luna. Impregnas mi piel, nómada de deseo y deshago la lluvia en las manos del olvido. Ahora lo sé,
me faltabas tú.
Imagen: Xav Aka Sakana
Música: Martirio, Me faltabas tú.
12 comentarios:
Dos veces veintitrés... en esta tarde amarilla entre las rendijas de la ventana del PC y el azul de la voz de Martirio, en la que me he bajado del mundo para hacer un inventario de "faltabas tú"
Fdo. el 91
Acabo de salir de la ducha, me esta recorriendo una gota el rostro, y tú esperándome.
Hay días que todo marcha sobre ruedas.
VEINTICUATRO. Me encantas.
Impresionantemente sensual.
Hermosa lluvia.
efecto del calor quizás?..las tormentas veraniegas...
Estremecedor. Eres única describiendo con elegancia determinadas circunstancias. Haces que me palpite el cuerpo entero al embarcarme en la imagen que describes. Gracias por compartir con los simples mortales tus letras.
Recibe un cariñoso saludo,
tTiger
VEINTICINCO: pobretona tú.
Aaaah... "llueves". No hay mejor tormenta que la que cae sobre dos bocas.
Qué cosas más bonitas dices, por dios. :)
ay que morbosa la tormeta de verano y el reencuentro entre gotas, porque se encuentran, no? se pillan en amarillo, no?
Tierras de humedales.
Pues que vivan las tormentas...
Entre Freud, Dalí y Stoker. Original.
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